Mucho se está hablando del primer debate, en prensa, televisión, Internet, entre los dos candidatos del PSOE y PP, en todo caso ha sido un auténtico espectáculo televisivo, que no ha dejado a nadie indiferente…
Aún a riesgo de tratar el tema con superficialidad, como hace «la políticamente correcta» Ana Rosa Quintana en su mesa política, (para estas cosas, como te echamos de menos María Teresa Campos…), diré que algunos detalles me llaman la atención…
Me pareció que Manuel Campo Vidal, no fue consciente, de que en realidad era sólo el moderador, no tenía por qué asumir esa dosis de protagonismo al inicio, en el desarrollo, (por no intervenir para cortar interrupciones a tiempo, quizás para compensar los minutos malgastados antes) y al final del debate.
Sobraba maquillaje al acto y a los «contendientes», y como curiosidad, Zapatero vuelve a vestir con traje oscuro, (ya dijimos que en su afán por parecer serio no le iba a pedir consejo a Agatha Ruiz de la Prada), y un Rajoy, sin complejos, tal y como demostró durante el debate, acudió con corbata de color rojo pasión…
Frente al debate frío y cerrado entre Solbes y Pizarro, éste se reveló como más vivo ,incluso en algunos momentos pareció que Rajoy arrinconaba a Zapatero en temas como Inmigración,( que no quiso tratar), la crisis económica (que no quiso ni quiere ver a pesar de las dificultades de todos para llegar a fin de mes), y la lucha o no contra ETA según el momento y el criterio cambiante del Gobierno.
A propósito para hablar de Educación, bien podían ambos contendientes no interrumpirse mientras el otro habla, y procurar hablar del presente entre los dos candidatos presentes…Fea costumbre, esa de interrumpirse, alimentada por la pasividad de un moderador al que en algún momento le sobró verborrea y ademanes…
Vimos cómo Zapatero se alió con el «mundo de la cultura»(en tela de juicio tras el generoso canon digital que ha impuesto el Gobierno) y Rajoy con «el currante».
Resulta curioso, las opiniones tan distintas que puede haber sobre un mismo «objeto de debate». Así, mientras los sondeos posteriores al duelo, de Cuatro, La Sexta, Antena3, daban como vencedor a Zapatero. Otros, como los de COPE, elsemanaldigital.com (que registró máximo de participación con más de 28.000 personas), o Libertaddigital, convertían en protagonista a Rajoy junto a multitud de editoriales y comentaristas.
El triunfo vuelve a ser para los espectadores, que dieron al debate la trascendencia que tenía. Fue visto por 13 millones de personas, (audiencia repartida entre TVE, que tuvo 8 millones, Cuatro y La Sexta con dos y pico cada una, Popular TV con 1, entre otros), superando así la audiencia que tuvieron los debates de 1995 entre González y Aznar ( de los que el primero lo ganó Aznar y el segundo, González), y programas como la final de O.T. del año 2002 y el festival de Eurovisión de ese mismo año, aprovechando el tirón popular de «Rosa de España», ( que no Bardem, a pesar del importante premio que ha logrado).
Un comentario de los lectores
Héctor
26 febrero 2008 a las 23:56
1Hola. Sólo hacer una observación. La audiencia de TVE durante el debate obtuvo una media de 8 millones de telespectadores y el minuto de oro fue de 9,4 millones.
Un saludo.