El presidente del gobierno español, empezó la campaña sin condenar las «agresiones» sufridas por Rosa Díez, Dolors Nadal, consejeros populares en Parla, (tampoco los del día de reflexión de las pasadas elecciones a sedes del PP). Hoy sí ha mstradosu rechazo al asesinato a sangra fría y por la espalda de una ex edil socialista de nombre Isaías, pero le ha faltado humildad para no hacer de ésto una cuestión personal, para reconocer errores, pedir perdón, o al menos la retirada de la resolución que le arrancó al Parlamento sobre negociación con ETA, sólo «si había voluntad definitiva de dejar las armas», voluntad que obviamente nunca ha existido o ha sido sólo temporal pero mantenida por parte del gobierno durante 4 largos años, con interrupciones, y víctimas mortales y por engaño, incluídas. También le ha faltado, dureza para hablar de «derrota» de la banda terrorista, y en su lugar,  lo encubre bajo un eufemismo » la desaparición de la organización», (¿por sí sóla?). Esa misma debilidad, ante hechos consumados, premeditados y de una crueldad poco humana, se ha traducido a lo largo de estos cuatro años de legislatura en una creciente y alarmante inseguridad ciudadana, en todos los ámbitos.

 Por si fuera poco, hoy desayunábamos con una entrevista hecha por la Ser y recogida por Europa Press, en la que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, señaló que está «más de acuerdo» con que se multe en Cataluña a comerciantes que rotulen sólo en castellano y no en catalán, respondiendo así a una ‘miniencuesta’, en la que también aseguró estar «bastante de acuerdo» con que haya un gobierno en mayoría sea del partido que sea para que no se vea sometido a las minorías… 

  El presidente, ha reconocido haber sido»demasiado ambicioso» al pretender en una sola legislatura resolver la cuestión catalana y el terrorismo de ETA, aunque matiza que en lo referido a Cataluña, no es un «problema», sino un «activo para España». Después, subrayó que «nadie tiene la propiedad intelectual de la idea de España», (me pregunto, ¿cuál es la mínima idea de España de la que se parte?, si es que tiene alguna, para vaciar el Estado de competencias en favor de los caprichos eternos de los representantes autonómicos).

 Finalmente, a la cuestión de si «la gestión de la economía que hizo el Gobierno de Aznar fue en términos generales positiva para España», Zapatero contestó con dedén estar en «bastante desacuerdo».  Terminó la entrevista con un deseo para ‘la niña de Rajoy’: «Que sea feliz, igual que le deseo a él», a lo que añadiría que sí Señor Zapatero, pero la felicidad vendría como consecuencia de poder vivir en libertad,  sin miedos y sin ver pisoteados sus derechos, los que no votan a los nacionalistas o a usted…

 A propósito, haciendo memoria…, menuda diferencia se aprecia entre la trayectoria de Zapatero y la seguida por Mariano Rajoy, que ha condenado con firmeza todo acto de violencia que sufra cualquier persona, sea político o no, ha propuesto una ley que garantice la posibilidad de estudiar en castellano, si se quiere, en toda España, (a  la que no se sumó Zapatero), y hoy tras el asesinato de Isaías Carrasco, ha dicho: «ya saben lo que pienso de la lucha antiterrorista»(y que ha venido defendiendo y repitiendo desde hace años junto a socialistas como G. Mora, o Rosa Diez, ahora desde UPD) y después de una pausa significativa y de un silencio atronador, sentencia: «los únicos responsables son… los terroristas, asesinos de ETA», a los que hemos de combatir todos juntos… Esa, es la coherencia de conducta que debe tener, y claridad con que debe expresarse un presidente del Gobierno, un sereno hombre de Estado, en momentos tan graves. Lección para muchos y desgraciadamente aprendida por muy pocos.