Monseñor Antonio Mª Rouco Varela acaba de ser elegido nuevamente Presidente de la Conferencia Episcopal, para el trienio 2008-2011, tras el trienio en que le sucedió en el cargo Monseñor Ricardo Blázquez.
Han sido 39 votos, frente a los 37 de Mons. Blázquez los que le han puesto de nuevo en el cargo.
Mucho más conservador que su antecesor, se espera de él que siga luchando contra el caos al que el Gobierno Socialista nos ha llevado en materia de Terrorismo, Familia y Valores y Educación.
Esperemos, que, gane quien gane el domingo, prevalezcan los Valores y no se los carguen de la manera que el señor Zapatero, y antes de ello el señor González, hicieron. Recordemos la tan traída y llevada polémica asignatura que el señor Zapatero pretendía imponer a los jóvenes, la llamada «Educación para la Ciudadanía», para manipularlos y cambiar su moral y sus conciencias, aceptando que se llame familia a la unión homosexual y se considere matrimonio a la unión entre dos personas del mismo sexo. Que le llamen como quieran, pero no pretendan cambiar el concepto de familia, que es el tradicional. Allá cada cual con su moral y sus principios, pero que no pretendan manipular así unas conciencias que aún no tienen capacidad de decisión ni distinguen entre lo normal y lógico y lo que va contra Natura. Pero es preferible cargarse la asignatura de Religión, para un Partido son moral ni principios, y así adoctrinar a los votantes de Mañana, que los de hoy ya tiene muchos votos «comprados» entre los gays, los etarras a los que defiende y libera y con los que negocia y supuestamente a los inmigrantes, a los que se promete el oro y el moro cuando la realidad es luego muy diferente. Cada vez se les pone más difícil la legalidad de sus documentos. Y los votos de quienes despreocupadamente gestan hijos y luego se les permite asesinarlos. Con, supuestamente una «legalidad» al aborto. ¿Es legal el asesinato? ¿Tiene más derechos un asesino al que por «humanidad» suelta o libera o trata como rey, después de todos los asesinatos que lleva a sus espaldas? ¿Tiene más derechos un asesino que una criatura que no ha venido al mundo y se le asesina sin darle una oportunidad de vivir? Negándole un derecho que le corresponde. Para los católicos el aborto es un asesinato y no tiene justificación alguna. ¿Quién nos asegura que tengamos más derecho a vivir que un nonnato que puede venir con algún problema que le impida respirar solo, andar…? ¿Es que cualquiera de nosotros tenemos la vida asegurada y el día de mañana no podemos tener un accidente que nos deje así? Y no todo el mundo que está así pide la eutanasia. Ése es otro cuento para legalizarla. Son pocos los enfermos, que ante la falta de ayudas, principalmente gubernamentales, prefieren la muerte a la soledad. Y ahí es donde debería estar el Gobierno, no prometiendo, sino haciendo. ¿Es que esos enfermos no tienen derecho a voto? Pero no interesan, es más fácil legalizar lo que muchos millones más piden, que aportar soluciones. Es más fácil callar a los católicos, como antaño, que perder votos, porque sus Programas Electorales son más de lo mismo. Y, lamentablemente no tenemos respuestas en la Oposición, porque también estuvieron y poco o nada hicieron.
Esperemos que Mons. Antonio Mª Rouco Valera logre ahora un entendimiento con el Gobierno, gane quien gane y sobre todo a cada cual se le respeten sus derechos, frente a los derechos de los demás. Que cada cual viva como le venga en gana, sin que sea a costa de acabar con los católicos y la Religión. Y por fin se pague lo que se debe a un colectivo de más de 10.000 Profesores de Religión a los que el Gobierno del Señor Gonzáles robó, no pagando lo que debía, y teniéndolos sin Contrato, ni Seguridad Social, y que, tras las muchas Sentencias a favor, el Gobierno sigue sin hacer efectivo ese dinero, que es mucho. Un dinero negro que se debió de emplear en a saber qué.
Que llega la Semana Santa y la disfrutan tanto católicos como ateos. Para tener vacaciones y no trabajar no hay confesiones ni católicas no ateas. Todo el mundo se apunta a no trabajar en las Fiestas Católicas. Pues si no creen en ellas, que las trabajen… Si no están de acuerdo en los Valores, y en la Moral, que respeten a quienes sí las tienen. Y si quieren «casarse», que se casen, pero no le llamen «matrimonios» ni «familia». Quieren un respeto que ellos no dan.
¡Enhorabuena, Mons. Rouco, por su nuevo nombramiento al frente de la Conferencia Episcopal!
Un comentario de los lectores
L. M.
7 marzo 2008 a las 18:56
1Enhorabuena a ti tb,Emilia, por la valentía y el entusiasmo con el que has escrito ese artículo, !saludos!.