Fue el galán por excelencia allá por los años 80. Norberto Ortiz Osborne, nacido en Madrid, el 7 de diciembre de 1953, más conocido como Bertín Osborne.  Su primera actuación fue en el 71 en el Festival de la Canción de El Escorial, en el que quedó en tercer lugar. Años más tarde, en una actuación en una Sala de Fiestas de Madrid le surgió su primer contrato discográfico, aunque debió «aparcar» el Country para dedicarse a lo que luego ha bordado, las baladas. Con el tan conocido tema «Amor Mediterráneo», por el que él no apostaba nada. Su segundo disco, «Como un vagabundo» no fue menos importante. En 1983 participa en el Festival de San Remo, con el Tema «Eterna Malattia», por el que recibió el Premio de la Crítica al Mejor Intérprete. Si borda las baladas, no menos bordadas resultan las rancheras. Y si eso puede extrañar, quizá tenga la explicación a que su padre le encantaban desde siempre.

     Su infancia y juventud las pasó entre Madrid, málaga y Jerez, sin ser buen estudiante en ninguno de los centros en los que estudió. Era un joven rebelde que no quería sentar la cabeza, pero constante y trabajador en lo que se propuso, como buen sagitario. Aunque la Música no era lo suyo, y estaba trabajando para Rumasa, al final accedió a grabar ese primer Disco que fue el comienzo de una prolífica Carrera.

      Este polifacético caballero ha presentado numerosos programas de éxito en TV. Uno de ellos, el que quizás recuerde con más simpatía, «Contacto contacto», emitido por Tele 5 desde el 92 al 94. Además de en esta Cadena, ha trabajado en diversos programas para Antena 3, como «Lluvia de Estrellas», «Menudas Estrellas» y «Trato Hecho», entre otros. Así cono «Ankawa» en TVE. Este verano pasado nos ha hizo reír con el tradicional «Grand Prix», que hasta ahora había presentado Ramón García. Según parece, en breve empezarán a grabar la siguiente Edición, que se emitirá el próximo verano.

     Se declara un entusiasta de los niños. Se lo pasa en grande entre ellos. Y, aunque los programas no sean de demasiada calidad, al menos nos hace pasar ratos muy agradables.

    En julio de 1977 se casó con Sandra Domecq Williams, en la iglesia de San Miguel. Un año después nacía su hijo Cristian que falleció diez días después a causa de una malformación del hígado. Después nacieron su hijas Alejandra (noviembre de 1979) y Eugenia (mayo de 1986). En julio de 1988 se separaron a raíz de unos rumores que unían a Osborne con otra mujer. A comienzos de enero de 1989 Sandra Domecq dio a luz su tercera hija, Claudia. Los trámites para la separación legal los iniciaron a final de 1990. Desde 1992 y hasta primeros de febrero de 1996 estuvo unido a la americana Arianne Brown.

    Heredero del título noble de Conde de Navas y de Donadio de Casasola, 10 de junio de 2006 el popular cantante contrajo nuevas nupcias, por la Iglesia,  con Fabiola Martínez , una modelo venezolana 20 años más joven. El cantante y su esposa fueron  padres hace un año de un niño, prematuro, que nació a las 29 semanas de gestación en el madrileño Hospital de La Paz. La pareja ha pasado por momentos muy «especiales» a causa del delicado estado de salud de su primer bebé. El pequeño, Kike, que llegó a este mundo con lesiones muy importantes, se recupera favorablemente gracias a su fuerza y al gran apoyo que le ofrecen sus padres en todo momento.

      Bertín Orborne, con fama siempre de mujeriego y de vividor, nos ha demostrado que cuando el río suena no siempre lleva agua, y que detrás de esa imagen que le ha dado fama por todo el mundo hay una gran persona, un gran ser humano, un gran padre, un gran abuelo, pero sobre todo un caballero de los pies a la cabeza y con un coraje fuera de serie. Ahora que tanto se habla del aborto y se piden ampliaciones de tan cruel asesinato a inocentes que ninguna culpa tienen de haber sido concebidos y gestados, él y su esposa nos han demostrado que el amor y la entrega, el sacrificio y la constancia pueden obrar el milagro de la vida. Su hijo Kike, que acaba de cumplir un año, ha superado contra todo pronóstico los malos augurios de los médicos, que a pesar de los avances y adelantos de la Medicina, nada saben cuando es el amor y la entrega lo que han sacado adelante a esta criatura, a pesar, lógicamente de los cuidados médicos, la rehabilitación, etc.

    Ha demostrado Bertín que no necesita vivir de exclusivas a costa de los problemas de su hijo, como hacen muchos famosos de tres al cuarto aireando sus trapos sucios. Cuando tiene alguna novedad que contar de su hijo Kike facilita a los Medios de Comunicación las noticias, gracias a Dios cada vez más esperanzadoras, para que no se especule ni de hable ni se invente.

    Digno de elogio este polifacético artista, este padrazo, este abuelo, este aún galán,  del que ahora tenemos oportunidad de escuchar una recopilación en dos CD de su discografía, que sin duda hará las delicias de todas sus seguidoras. Bertín Osborne, todo un caballero.