Tras el último altercado protagonizado por Andrés Pajares en un bufete de abogados de la capital, donde entró disfrazado y con una pistola simulada, agrediendo al abogado y rociando con un spray a su mujer, motivo por el que fue detenido y conducido a los calabozos de Plaza Castilla donde pasó la noche a la espera de declarar ante el juez. Allí sufrió un ataque de ansiedad que incluso hizo que el actor se desmayara.
Después de salir del juzgado en libertad con cargos, tomó rumbo a Barcelona y allí la ha vuelto a liar. Fue en un hotel de la ciudad Condal en la madrugada del jueves, un Pajares fuera de sí realizó grandes destrozos en su habitación, por lo que los responsables del hotel avisaron a los Mossos para que le desalojaran.
Se encontraba acompañado en esos momentos por su secretaria personal.
Nuevamente Andrés fue trasladado a dependencias policiales y actualmente se encuentra ingresado en una clínica.
Este nuevo episodio de Andrés puede hacer que un juez ordene su ingreso en una clínica mental para su recuperación, y sin duda seria la mejor solución ya que es evidente que la salud mental de Andrés Pajares no está bien.
Es una pena que un actor de su categoría y con una trayectoria profesional tan extensa, termine de esta forma si alguien no lo remedia ya que él no está capacitado para tomar decisión algúna visto lo visto.
Por su bien esperemos que se deje ayudar y aconsejar por sus amigos de verdad que los tiene y muy buenos aunque no lo aprecie en estos momentos.